Esta Jornada 7 de la Liga MX Femenil estuvo llena de goles, pero también se manchó con actos homofóbicos cuando los aficionados hicieron el grito prohibido en dos de los recintos deportivos en los que se disputaban encuentros. El primer caso se dio en el duelo entre Santos y Cruz Azul, donde una aficionada fue retirada del TSM Corona.
La otra situación se dio en el Estadio Universitario mientras el conjunto de Tigres se midió ante Toluca, aquí fueron dos asistentes a quienes tuvieron que sacar del inmueble por no cumplir con las reglas establecidas en el protocolo. De esta manera fueron tres los implicados en estas acciones que son reprobables y que no se veían con tanta frecuencia en el Circuito Rosa.
Por parte de la Liga MX se emitieron dos comunicados para informar sobre lo sucedido tanto en el TSM como en el Volcán y que los fanáticos al futbol femenil estuvieran enterados de estos actos para evitar caer en ellos e incluso poder evitar que en su entrada a los estadios los demás eviten que estas prácticas se sigan dando.
Finalmente los encargados de la comunicación en el futbol femenil mencionaron que no fue necesario detener los encuentros, simplemente se tomaron las medidas, el sonido local en los recintos llamó a los asistentes a no fomentar el grito y con ayuda de la seguridad privada de los inmuebles se pudo sacar a quienes lo ocasionaron.