De acuerdo con la información de Juanma Castaño, el conjunto del Barcelona invirtió su propio dinero para poder mantener de manera contable a sus dos primeros movimientos. Fueron 150 millones de euros que puso el equipo blaugrana para, en primera cuestión la venta del 25% de los derechos de TV a Sixth Street con un total de 667 por la venta, pero sólo haber pagado 517.
El truco del Barcelona
Lo que sucedió es más o menos de esta manera: tomando en cuenta que Barcelona contaba con cierto jugador, pero si frente a la Liga no se demostraba que tenía cierto costo no podría arribar. De esta manera la empresa interviene, pero le da un porcentaje para que ambos puedan compartir al futbolista. Aunque con esto, si el conjunto blaugrana pone lo restante, ante las autoridades puede decir que ya lo vendió al costo máximo sin saber que se puso esa parte.
Tomando en cuenta lo anterior se dijo que: "Sixth Street invierte 517, lo que producirá una plusvalía de 667", pero Joan Laporta externó que "se habían contabilizado 667". Esos 150 millones más o menos en Fair Play fueron para los fichajes de Lewandowski (33 millones), Raphinha (23 millones) y Koundé (22 millones).
Esta situación hará que el Barça pague una factura enorme, por lo que tendrá 37,5 millones de impuestos más que pagar debido al tema. Por ahora no puede registrar a jugadores hasta que no se salde esa deuda o de cierta manera tendrá que ajustar el plantel antes del 12 de agosto que es cuando da inicio la LaLiga en España.