El mercado de transferencias cerró con una llamativa transacción donde estuvieron involucradas dos escuadras populares del futbol mexicano, de un lado el Club América quería deshacerse de Leonardo Suárez para abrir una plaza de no formado en México y así adquirir a Javairo Dilrosun, mientras que el Club Universidad Nacional fue el que se encargó de comprar a Leo, en una operación que generó múltiples críticas.
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Considerando que ambas instituciones guardan una rivalidad histórica, algunos aficionados se molestaron por ver a un ex América vistiendo los colores de Pumas, mientras que los Azulcremas no vieron con buenos ojos reforzar a una rival directo en la Liga MX. Sin embargo, ante el anuncio de Dilrosun, los seguidores de Coapa se olvidaron inmediatamente de Leo, quien podría tener un problema que le impediría brillar en Pumas.
De acuerdo con reportes de ESPN, Suárez tiene un problema de salud crónico que le impide disputar los 90 minutos de tiempo corrido, con lo que tiene que ingresar de cambio o salir en caso de que arranque como titular. Se cree que esta fue la razón por la que América buscó tan rápido su salida, pues aunque Leo pasó las pruebas médicas, no se encuentra al cien por ciento.
¿Pumas necesitaba a Leonardo Suárez?
En Universidad Nacional saben que con el plantel anterior pudieron llegar hasta la liguilla, pero no les alcanzó para colocarse como verdaderos candidatos al campeonato, siendo superados con facilidad por Tigres, rivales a los que enfrentarán precisamente esta noche. Por ello es que la directiva buscó reforzar al grupo con la llegada de nuevos talentos, entre los que se encuentra el propio Leonardo.
Hasta antes de los reportes de su problema, Suárez sonaba como un buen refuerzo para Pumas, pues su rendimiento por la banda derecha y en el centro del campo fue muy bien aprovechado en los pocos partidos que tuvo con América y principalmente en la escuadra de Santos Laguna. Sin embargo, ahora hay dudas sobre si lo mejor fue contratarlo.
¿Leo Suárez le guarda rencor al Club América?
Independientemente de que la despedida con Suárez fue muy tranquila y le desearon éxito en sus siguientes proyectos, no deja de ser evidente cómo las Águilas se esforzaron en desprenderse de Leonardo Suárez, a tal grado de no temer por mandarlo a Pumas, un rival directo donde saben que la podría pasar mal en los primeros partidos, cuando la fanaticada no lo acepte del todo hasta que lo vea jugar con buenos resultados.
Puede que Suárez entienda que así es el futbol y el negocio de este deporte, pero será muy interesante verlo jugar en el próximo Clásico Capitalino, donde seguramente estará mucho más motivado que de costumbre para mandar a callar a la afición Azulcrema y demostrar que su calidad fuera de Coapa es algo de lo que se arrepentirán.