En 2005, una generación de jóvenes mexicanos hizo historia en el Mundial Sub17 de Perú, ganándole (y goleando) a nada menos que Brasil en la final. Seis años después, se repetía la hazaña en el Estadio Azteca, con una victoria 2-0 contra Uruguay, convirtiendo a México en bicampeón mundial Sub-17. Sin embargo, en vez de potenciar a los jóvenes mexicanos, parece que en la Liga MX se les condena al olvido, dándoles pocas oportunidades con todo y que ya no hay Descenso en el torneo.
Durante el presente torneo, apenas 9 jugadores mexicanos menores de 18 años disputaron al menos un minuto de juego en las 17 jornadas de fase regular. Es decir, un promedio de solo un jugador por cada dos equipos del futbol nacional. Y aún peor, solo seis de esos nueve disputaron 90 minutos o más. Una muestra de la poca importancia que Directores Técnicos y Directivos le dan a la formación de futbolistas mexicanos, materia prima esencial de nuestro deporte.
Bryan González de Pachuca (433 minutos), Sebastián Yanez de Xolos (373), Daniel Ambriz de León (255), Heriberto Jurado de Necaxa (200), Alek Álvarez de Pumas (191), Jesús Hernández de Querétaro (139), Rodrigo Huescas de Cruz Azul (63), Karel Campos de América (43) y Emilio Martínez de Puebla (14) son los únicos jugadores menores de 18 años en tener oportunidad de mostrarse en el campo en Primera División. De todos ellos, solo Hernández es centro delantero, posición en la que históricamente México adolesce. Ni siquiera equipos que se jactan de ser grandes canteras como Pumas, Atlas o Chivas destacan en dar oportunidades, estando estos dos últimos ausentes en la lista.
En comparación con otras Ligas, la MLS tiene ya a 20 jugadores en la presente campaña que han superado los 90 minutos de juego, además de otros 10 que han sido tomados en cuenta aunque sea un minuto. Destaca por supuesto el mexicoestadounidense Ricardo Pepi de 18 años, el juvenil con más minutos disputados (2252) en la Liga estadounidense, y que justo se decidió por jugar con la selección de las Barras y las Estrellas por no tener el seguimiento esperado por parte de los directivos del Tri.
El futbol europeo, el ejemplo a seguir
Si bien hablamos de jugadores con un nivel muy superior no solo a otros juveniles sino a futbolistas de cualquier edad, recientemente hemos visto a jugadores como Pedri y Gavi en España, Kylian Mbappé con Francia, Erling Haaland con Noruega, João Félix de Portugal, entre otros, ser elementos importantes tanto en sus clubes como en sus Selecciones, demostrando que, si bien es cierto que hay que llevar un proceso antes de lanzar a los juveniles a los retos de las divisiones mayores, el talento no tiene edad y debe ponerse a prueba en las situaciones más exigentes.