Fue en abril de 2020 cuando el expresidente de la Liga MX, Enrique Bonilla, quien se encontraba aún en el cargo habló de los retos a los que se enfrentaría el Ascenso MX con la entrada de la 4T, ya que intentaba hacer que los directivos de los equipos dieran el visto bueno para que se suspendiera esta modalidad por los próximos seis años.
En ese momento, el mandatario señaló a un culpable y sugirió que no era una decisión meramente de él, sino que habría muchos problemas en los equipos que tendrían que ver con lo económico y sobre todo con lo que el gobierno iba a invertir o no en ellos, por lo que esperaba que por unanimidad se tomara la decisión de la extinción del ascenso y descenso.
"Con todo respeto, salvo algunos de ustedes que reciben dinero del sector público, perdón por ser tan claro, otros no lo reciben y reciben dinero solo de sus patrocinios, de sus ventas. Yo hablé de todos los que reciben dinero de gobierno, no estoy hablando exclusivamente de Correcaminos, aquí hay varios, y saben perfectamente que son más de uno los que reciben dinero del sector público mismo que, entre la 4T y la crisis en la que estamos cayendo a una velocidad que no nos estamos dando cuenta, pero que es terrible la crisis", externó.
Bonilla puso en tela de juicio el apoyo que los clubes estaban recibiendo por parte del nuevo gobierno, por lo que apuntó a que la crisis en los equipos sería tan fuerte que lo mejor era tomar esa resolución en ese momento. Tomando en cuenta que en ese instante aún se desconocía cuánto iba a impactar la pandemia en el balompié mexicano.
"Hoy, el Fondo Monetario Internacional volvió a salir con 6.5 de caída en picada, entonces creo que tenemos que cerrar filas, aprovechar esta oportunidad de rehacernos, de reconfigurarnos y de trabajar con un objetivo que es fortalecer a nuestros clubes de tal manera que la diferencia que existe entre los clubes de Liga y los clubes de Ascenso cada día sean menos y podamos, entonces sí, expandirnos, yo sé que a algunos de ustedes no les gusta, pero al estilo americano ir creciendo temporada con temporada conforme se vayan consolidando los clubes", concluyó.
Bonilla basó sus argumentos en los datos que arrojó el FMI, por lo que las críticas que se hicieron a él por parte de esta decisión en realidad apuntó a lo que el gobierno podría aportar a algunas escuadras, mientras que unas otras carecían de ingresos, tal como se vio en la Liga de Expansión con el caso de Irapuato que por cuestiones económicas no se les dio la oportunidad de llegar.