La formación del futbolista mexicano sigue siendo cuestionable, especialmente después de que la Selección Mexicana Sub 20 se perdiera el boleto para el Mundial con límite de edad y el pase a los Juegos Olímpicos en la rama varonil. Se culpó al Director Técnico Luis Pérez como responsable, pero es una realidad que la Liga MX no favorece el crecimiento de los nuevos talentos. Sin embargo, más allá de las trabas directivas, también hay un gran problema en el jugador nacional, el ego.
Luego de que Guatemala venciera a México desde los once pasos, el arquero Jorge Moreno que fue figura al detener dos tiros, declaró que la actitud de los representantes del Tricolor fue bastante creída, viendo a sus rivales hacia abajo, particularmente el capitán Fidel Ambriz, quien los miraba de pies a cabeza juzgando el aspecto de los guatemaltecos, pero finalmente se comieron las miradas y se marcharon tristes de regreso al país.
Todo el partido nos miraban para abajo, más el capitán. En el tiro de esquina cuando yo hablaba, me volteaba a ver de pies a cabeza, pero lo demostramos en la cancha. Las miradas se las comieron y se van a ir tristes para su país.
El ego del futbolista mexicano
Dado el gran negocio que implica el Futbol Mexicano, normalmente se menosprecia al balompié de otros países, especialmente de Centroamérica y Norteamérica en competencias internacionales de la Concacaf. Incluso se suele ver hacia abajo a las escuadras de Conmebol, viendo hacia arriba solo al Futbol Europeo. Este tipo de actitudes alimentadas por la misma prensa solo contaminan a los jóvenes talentos.