Este viernes 25 de marzo se registró una explosión muy cerca de la pista de Jeddah una refinería de petróleo justo cuando estaban iniciando las primeras prácticas del Gran Premio de Arabia Saudita, de inmediato, comenzaron los señalamientos de los medios internacionales que se trataba de un ataque directo de los hutíes, grupo rebelde Houthi de Yemen.
La petrolera de Arabia Saudita, Aramco resulta ser socio de la Fórmula 1 y de Aston Martin, desde hace unos años cuando anunciaron un acuerdo multianual, por ello, el ataque el cual sería el segundo “aviso” durante esta semana. No obstante, frente al riesgo que implicaría para todo el personal involucrado en las carreras de seguir con el itinerario, la resolución está lejos del sentido común.
Determinación de la F1
Tras la explosión, se dio una reunión entre los jefes de las escuderías y pilotos, sin embargo, nadie esperaba que la decisión por el director de la Fórmula 1, Stefano Domenicalide, fuera de continuar con el Gran Premio de Arabia Saudita según lo programado, causando indignación entre los aficionados y conductores, donde Checo Peréz se mostró en desacuerdo.
Declaraciones racistas contra el piloto mexicano
Según las autoridades de la entidad prometen la total seguridad en el GP de Arabia Saudita durante todo el fin de semana. Aunque en redes sociales se viralizó un momento de “racismo” contra Checo Peréz de parte de Helmut Marko, quien es el asesor de la escudería Red Bull al asegurar que no entendía el temor de Sergio si era mexicano.
“Checo Pérez tiene mucho miedo, pero no es muy diferente si estás acostumbrado a vivir en la Ciudad de México", dijo Marko.